En 1875, el Ferrocarril Buenos Aires al Puerto de la Ensenada compró a Laureano Godoy una fracción de terreno para construir una estación. Ésta se llamó Godoy, como era usual en la época de colocar nombres a las estaciones de acuerdo a los propietarios de las tierras que fueron afectadas para tal función.
Alfonso Ayerza, propietario de la Estancia "Las Hormigas", lindante con la estación, gestionó ante las autoridades del Ferrocarril Sud el cambio de nombre de la misma por el de Plátanos, seguramente inspirado en la abundancia de plátanos orientales y su rápida adaptación al lugar, que junto a otras especies arbóreas, plantó en su estancia. Su pedido se concretó el 1 de febrero de 1906. En 1980, las autoridades de Ferrocarriles Argentinos, cambiaron el nombre de Plátanos por el de Dr. Ricardo Levene, quien fuera un importante historiador. El nuevo nombre no fue aceptado por los población local, derribando varias veces el cartel nomenclador, lo que llevó a que, posteriormente, se restituyera el nombre Plátanos.
Estación ferroviaria Plátanos en 1954, nombre propuesto por Alfonso Ayerza. Imagen publicada en un loteo de Vinelli. Archivo Asociación Orígenes Berazategui |
De acuerdo al Manual de Estaciones de 1958, la estación ferroviaria Plátanos estaba habilitada para pasajeros, encomienda, telégrafo y hacienda, aclarando que recibe y despacha hacienda con previo arreglo únicamente. Esta función de hacienda probablemente estuvo vinculada con la estancia "Las Hormigas", que si bien para esta época ya había desaparecido, esa función seguía vigente, no así en el Manual de 1980 donde se advierte que ya no se especificaba la función de hacienda.
Principios de la década de 1980, cuando la estación Plátanos cambió su nombre por el de Dr. Ricardo Levene.
Archivo Asociación Orígenes Berazategui
La estación tiene su edificio principal con boletería del lado este del andén y un refugio para pasajeros del lado oeste, que antiguamente mediante una elegante escalera, se comunicaba con la estancia "Las Hormigas"
Recientemente, la estación ferroviaria Plátanos fue remodelada totalmente por la empresa UGOFE-Línea Gral. Roca, dándole un aspecto moderno aunque perdiendo, en gran parte, su aspecto original.
Cabe mencionar que el pueblo de Plátanos comenzó a crecer y desarrollarse después de lotearse una parte de la estancia "Las Hormigas", mientras que la otra parte de dicha estancia fue comprada por la industria textil SNIAFA que se instaló en el lugar. Ambos hechos se produjeron a fines de la década de 1940. Así, se puede afirmar que el origen de Plátanos está muy ligado a las familias Ayerza y Bustillo.
Alfonso Ayerza, dueño de la estancia "Las Hormigas", quien impuso el nombre de Plátanos a la estación ferroviaria Archivo Ana María de Mena |
Alfonso Ayerza, nació en Buenos Aires en 1862. Se casó con María Elena Jacobé Iraola y en 1886 compraron a la familia Godoy, 140 hectáreas de tierras surcado por el arroyo Las Conchitas, en la actual localidad de Plátanos. Allí erigieron la estancia y haras "Las Hormigas", nombre que remite a la abundancia de estos insectos en el lugar. Al poco tiempo esta estancia y haras se convirtió en uno de los principales establecimientos del país en la cría de caballos árabes y toros Hereford.
Casco de la estancia y haras "Las Hormigas", circa 1900. Archivo Municipal de Fotografías Antiguas |
Blanca Ayerza, hija de Alfonso, se casó con el prestigioso arquitecto Alejandro Bustillo y vivieron en una casa aledaña a la estación ferroviaria Plátanos, llamada "Los Claveles". Ésta había sido regalo de bodas de la familia Ayerza al nuevo matrimonio. Esta casa tenía jardines con muchas flores, donde abundaban los claveles, de allí su nombre. Asimismo, estos jardines llegaban hasta la orilla del arroyo Las Conchitas, en cuyo cauce Alfonso Ayerza emplazó una réplica de la estatua de la Venus de Milo, admirada por los pasajeros del tren al cruzar dicho arroyo. Esta escultura se encuentra actualmente en la entrada del Centro Cultural León F. Rigolleau en la ciudad de Berazategui. Alfonso Ayerza falleció en Buenos Aires en 1942 casi con 80 años de edad.
El arquitecto Alejandro Bustillo, quien vivió en el chalet "Los Claveles" frente a la estación ferroviaria Plátanos. Imagen publicada en internet. |
Bibliografía consultada
- Rodriguez Avellón, Eduardo. Crónica de mi pago. Asociación Orígenes Berazategui, 1997.
- De Mena, Ana María. Don Gregorio. Edición de la autora, 2000.
- Waddel, Jorgel Una cuestión de nombre. Revista Todo Trenes N° 59. Mayo-junio 2008.
- Manual de Estaciones. Empresa Ferrocarriles del Estado Argentino. Primera edición, 1958.
- Enciclopedia Visual de la Argentina, Tomo II. Clarín, 2003.
Prof. Raúl Alberto Leyes
Asociación Orígenes Berazategui
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ResponderEliminarEn la década de 1960 cuando pasaba a bordo del tren desde La Plata, solía ver esa construcción semi destruida
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